-¡Llegaremos tarde al colegio!- Grito Christian por enésima vez. Ya estaba levantada desde hace unos minutos atrás solo que no había salido de la habitación. Abrí la puerta y lo mire a Christian que estaba con su teléfono.
-Ya estoy lista- Dije rodando los ojos.
Bajamos a desayunar y luego empezamos a caminar en dirección a la escuela. Al llegar, lo primero que hice fue buscar a Brid y a Ryan.
-¡Amigos!- Grite cuando los vi. Para mi mala suerte ellos ni me escucharon, pero unos chicos se dieron vuelta, pensado que les había gritado a ellos- ¡Ustedes no, ni siquiera los conozco!- Le dije cuando pase por su lado corriendo- ¡Chicos!- Volví a grita y ellos esta vez me escucharon- Los he estado buscando- Dije entre cortado gracias a mi falta de aire.
-Hola, ¿no?- Bromeo Ry.
-Si, si, como sea- Rodé mis ojos-...
-¿Quieren unirse al comité del baile de primavera de este año?- Pregunto una chica que pasaba por allí con una libreta en la mano interrumpiendo lo que estaba por decir.
-No, no, gracias- Dije negando con la cabeza. La rubia chica se fue y continué hablando con mis amigos- Les tengo que comentar algo-.
-¿Ya tienes pareja para el baile?- Pregunto Brid interrumpiéndome otra vez. La mira un poco mal- Lo siento, solo quería saber. Yo iré con Harry- Comento con una tonta sonrisa.
-Yo ira con Bella- Dijo Ry.
-Si, si, como sea- Repetí- ¡Tengo un admirador secreto!- Grite, y como no vi por donde caminaba, choque con alguien- ¡Uh! Lo siento... ¿Niall? ¿Que haces aquí?- Pregunte.
-Eh,... yo venia por Chris- Respondió dudoso, lo que hizo que su respuesta pareciera un poco mas a una pregunta.
-Ok- Lo mire confundida y después el se fue. Nosotros seguimos caminando- Eso fue raro- Comente señalándolo.
-¿Tienes un admirador?- Pregunto Bird.
-¿Tienes alguna idea de quien sera?- Esta vez el que pregunto fue Ry.
-Si y no- Abrí mi casillero y cayó una tarjeta. Brid la tomo y leyó en voz alta.
-Espero que no te hayas olvidado de seguir las rosas a la luz del medio día- Me miro extraña.
-Todavía nos les termino de contar. Lo que paso fue que...-Sonó el timbre que significaba que la primera hora ya estaba por comenzar interrumpiendo mi historia- Les cuento en el receso- Comente y me fui a mi salón.
Como todo los lunes tenia historia. Entre al salón, en el cual todavía no llegaba el profesor y e senté al lado de Chris. No se si se acordaran de que tengo que pasar historia con el. Lo salude con una sonrisa y el me la devolvió.
-¿Que quería Niall?- Pregunte cuando me acorde que hoy lo había visto.
-¿Que?- Me pregunto confundido.
-Hoy lo vi a Niall y cuando le pregunte que hacia aquí me contesto que venia por ti, ¿paso algo?- Volví a preguntar.
-Conmigo no hablo- Dijo el negando con la cabeza.
-Pensé que si- Comente para después ponerle atención a la clase.
La clase paso lenta. Odio que pase eso. Cuando mas pendiente estoy de la hora, mas lento se mueven las agujas del reloj. Por suerte llego la hora del receso y pude hablar con mis amigos. Y no adivinan que paso, justo esos veinte minutos de recreo que tenemos, pasaron mas rápido que un 'hola que tal'.
En la mayoría de las demás clases mi concentración se baso en la carta. Mi desconcentracion era aun mas notoria en la ultima clase, la clase de teatro, el la cual no me salia ningún paso de baile. Lo que es raro ya que soy una de las mejor bailarinas que conozco.Y en realidad no conozco ninguna, así que saben en que puesto me encuentro.
Volví a casa con Chris. Quien se enojo mucho ya que no escuchaba nada de lo que el decía y siempre tenia que repetirlo una o dos veces. A la tercera, bufaba y no me contestaba. En el almuerzo, en el que solo nos encontrábamos Chris y yo, comí como si no hubiera mañana y al terminar fui directo al jardín. Fue el único lugar que se me ocurrió "seguir a las rosas", ya que se entra al aire libre, debajo de la "luz del medio día". Al llegar me encontré con pétalos de distintos colores, blancos, rosas y rojas, que me guiaban por un camino en el que nunca había ido. Admito que nunca se me ocurrió visitar la casa de los Beadles, por lo tanto no sabia en donde me encontraba.
De un momento a otro los pétalos desaparecieron y mire para todos lados y no había rastros de ningún pétalo mas. Al levantar mi vista me encontra con un ramo de rosas ¡gigante!. Eran un montón de rosas rosas, yo creo que había mas de 100 rosas aquí. En el centro se encontraba una rosa roja. La levanté para saber que tenia de especial para estar en el medio, y me di cuenta de que era de papel, no del papel común pero de papel. La alze a la altura de mis ojos y la detalle con mi mirada. Tenia escrito esta durara para siempre, como tu belleza. Al levantar el gran ramo, me encontré con un sobre, idéntico como el anterior pero de un color lavanda. Lo abrí rápidamente y este decía: "Se que te desilusiona no encontrarme ahí, pero en dos días y en esta misma hora bucea en la trasparencia, hasta lo mas profundo que puedas. Xo". Quede un rato pensado en que podía ser. No había entendido muy bien. Esta vez lo había hecho mas complicado.
Después de un rato pensar sentí que alguien me llamaba.
-¡____(Tn)!, ¿Donde te metiste?- Pregunto Christian cuando me vio- ¡Te anduve buscando como loco!- Grito después.
-Ya, lo siento, tenia cosas que hacer- Me excuse.
-¿Y esto?- Dijo viendo las rosas. Después tomo la tarjeta.
-¡Deja eso es mio!- Le grite tratando de sacársela.
-¿Que significa esto?- Volvió a preguntar.
-No lo se, ni yo la entiendo, ¡damela!- Trate de alcanzarla pero el la alzaba con la mano en una altura en la que yo no llegaba.
-¿Quien te la dio?.
-No es de tu incumbencia.
-Si, lo es.
-No.
-Si.
-No.
-Si.
-¡Ash! Te la regalo- Dije ya enojada. Tome el ramo de rosas y salí caminando en dirección de la casa.
-¡Vuelve aquí! No hemos terminado la conversacion- Grito a mis espaldas. Pare en seco y voltee.
-¡No entiendo por que te importa tanto!-.
-¿Que no te das cuenta?-
-¡¿De que?!- Le grite desesperada.
-¡De que me importas tu! ¡De que me gustas!-.
¿Que? ¿Encerio lo habrá dicho?.
Lo único que pude hacer fue mirarlo con mi rostro sorprendido y salir corriendo de ahí. No sabia que hacer o que decirle. No quería verlo otra vez, no después de esto. Escuchaba sus gritos llamándome, pero yo seguía corriendo. Salí de su casa para ir directo a la mía y encerrarme ahí. Supongo que no podía estar aquí todo el día, ya se estaba haciendo de noche y tendría que volver. Fui hasta mi habitación y me acosté en mi cama. Necesitaba sentir mi cama. Y poco a poco, si querer fui cerrando mis ojos para así quedar totalmente y profundamente dormida.
----------------------------------------------------------------------------------------------
Hola Chicas! Se que esta un poco corto, pero fue lo único que se me ocurrió. Espero que les guste :)
-Lia Jones-
-Todavía nos les termino de contar. Lo que paso fue que...-Sonó el timbre que significaba que la primera hora ya estaba por comenzar interrumpiendo mi historia- Les cuento en el receso- Comente y me fui a mi salón.
Como todo los lunes tenia historia. Entre al salón, en el cual todavía no llegaba el profesor y e senté al lado de Chris. No se si se acordaran de que tengo que pasar historia con el. Lo salude con una sonrisa y el me la devolvió.
-¿Que quería Niall?- Pregunte cuando me acorde que hoy lo había visto.
-¿Que?- Me pregunto confundido.
-Hoy lo vi a Niall y cuando le pregunte que hacia aquí me contesto que venia por ti, ¿paso algo?- Volví a preguntar.
-Conmigo no hablo- Dijo el negando con la cabeza.
-Pensé que si- Comente para después ponerle atención a la clase.
La clase paso lenta. Odio que pase eso. Cuando mas pendiente estoy de la hora, mas lento se mueven las agujas del reloj. Por suerte llego la hora del receso y pude hablar con mis amigos. Y no adivinan que paso, justo esos veinte minutos de recreo que tenemos, pasaron mas rápido que un 'hola que tal'.
En la mayoría de las demás clases mi concentración se baso en la carta. Mi desconcentracion era aun mas notoria en la ultima clase, la clase de teatro, el la cual no me salia ningún paso de baile. Lo que es raro ya que soy una de las mejor bailarinas que conozco.Y en realidad no conozco ninguna, así que saben en que puesto me encuentro.
Volví a casa con Chris. Quien se enojo mucho ya que no escuchaba nada de lo que el decía y siempre tenia que repetirlo una o dos veces. A la tercera, bufaba y no me contestaba. En el almuerzo, en el que solo nos encontrábamos Chris y yo, comí como si no hubiera mañana y al terminar fui directo al jardín. Fue el único lugar que se me ocurrió "seguir a las rosas", ya que se entra al aire libre, debajo de la "luz del medio día". Al llegar me encontré con pétalos de distintos colores, blancos, rosas y rojas, que me guiaban por un camino en el que nunca había ido. Admito que nunca se me ocurrió visitar la casa de los Beadles, por lo tanto no sabia en donde me encontraba.
De un momento a otro los pétalos desaparecieron y mire para todos lados y no había rastros de ningún pétalo mas. Al levantar mi vista me encontra con un ramo de rosas ¡gigante!. Eran un montón de rosas rosas, yo creo que había mas de 100 rosas aquí. En el centro se encontraba una rosa roja. La levanté para saber que tenia de especial para estar en el medio, y me di cuenta de que era de papel, no del papel común pero de papel. La alze a la altura de mis ojos y la detalle con mi mirada. Tenia escrito esta durara para siempre, como tu belleza. Al levantar el gran ramo, me encontré con un sobre, idéntico como el anterior pero de un color lavanda. Lo abrí rápidamente y este decía: "Se que te desilusiona no encontrarme ahí, pero en dos días y en esta misma hora bucea en la trasparencia, hasta lo mas profundo que puedas. Xo". Quede un rato pensado en que podía ser. No había entendido muy bien. Esta vez lo había hecho mas complicado.
Después de un rato pensar sentí que alguien me llamaba.
-¡____(Tn)!, ¿Donde te metiste?- Pregunto Christian cuando me vio- ¡Te anduve buscando como loco!- Grito después.
-Ya, lo siento, tenia cosas que hacer- Me excuse.
-¿Y esto?- Dijo viendo las rosas. Después tomo la tarjeta.
-¡Deja eso es mio!- Le grite tratando de sacársela.
-¿Que significa esto?- Volvió a preguntar.
-No lo se, ni yo la entiendo, ¡damela!- Trate de alcanzarla pero el la alzaba con la mano en una altura en la que yo no llegaba.
-¿Quien te la dio?.
-No es de tu incumbencia.
-Si, lo es.
-No.
-Si.
-No.
-Si.
-¡Ash! Te la regalo- Dije ya enojada. Tome el ramo de rosas y salí caminando en dirección de la casa.
-¡Vuelve aquí! No hemos terminado la conversacion- Grito a mis espaldas. Pare en seco y voltee.
-¡No entiendo por que te importa tanto!-.
-¿Que no te das cuenta?-
-¡¿De que?!- Le grite desesperada.
-¡De que me importas tu! ¡De que me gustas!-.
¿Que? ¿Encerio lo habrá dicho?.
Lo único que pude hacer fue mirarlo con mi rostro sorprendido y salir corriendo de ahí. No sabia que hacer o que decirle. No quería verlo otra vez, no después de esto. Escuchaba sus gritos llamándome, pero yo seguía corriendo. Salí de su casa para ir directo a la mía y encerrarme ahí. Supongo que no podía estar aquí todo el día, ya se estaba haciendo de noche y tendría que volver. Fui hasta mi habitación y me acosté en mi cama. Necesitaba sentir mi cama. Y poco a poco, si querer fui cerrando mis ojos para así quedar totalmente y profundamente dormida.
----------------------------------------------------------------------------------------------
Hola Chicas! Se que esta un poco corto, pero fue lo único que se me ocurrió. Espero que les guste :)
-Lia Jones-
